Hasta en un 40% disminuyen las ventas para algunos comerciantes en ciudad Obregón, algo que viven cada temporada de verano.
Después de 40 años de trabajar como comerciante, vendiendo verduras y artículos de abarrotes, doña Tina, dice que la historia se repite cada que llega el calor, de pronto las ventas bajan y solo ganan para volver a surtir, aunque también hay factores que influyen, como las vacaciones, pues los niños no van a la escuelas y los padres de familia no hacen tantas compras.
Jesús René, de la tienda Dulcelin, dice que la temporada alta para ellos ya pasó, y durante el verano las ventas disminuyen, pero siempre se preparan cambiando sus estrategias de venta o poniendo promociones.
Menciona que había mucha gente que acudía del Valle del Yaqui para surtir sus tiendas o vender dulces, pero ya no es así. Son al menos tres meses que deberán pasar en la misma situación.