Ciudad Obregón, Son.- Seguimos en el marco del mes de la lucha contra el cáncer de mama. Los negocios de tatuajes le dan una segunda oportunidad a las mujeres que libran esta lucha.
María Eugenia tiene 64 años. Se dedica al comercio. Su vida dio un giro al enterarse que tenía cáncer de mama. El miedo, la incertidumbre y la ansiedad se hicieron presentes, pero no dejó que la consumieran. Decidió someterse a tratamientos. Al momento de ser diagnosticada María Eugenia estaba en etapa cero, por lo que no requería quimioterapias ni radioterapias, pero implicaba perder su seno derecho.
"Pues sí me dolía y me sentía mal, triste, pero pues yo seguí adelante y aquí estoy gracias a Dios.", relató María Eugenia, a quien sus amigos llaman Marú.
Después inició un lento proceso de reconstrucción de seno. Cada 2 semanas tenía que acudir a realizarse el tratamiento para que su piel creciera hasta que finalmente su seno se equiparó al mismo tamaño que su par. Fue entonces que el doctor le hizo una recomendación.
" El doctor que me atendió en la última cita, ya que me había puesto las prótesis y todo eso me dijo ahora te falta el tatuaje. " , comentó ella.
Se enteró que hay estudios que regalan tatuajes a guerreras que vencieron el cáncer. María acudió al negocio Mano Negra.
" Yo no había venido y así pasaron 2 años, porque todavía me daba cosita. Pero un día dije que voy a ir a preguntar. ", agregó María Eugenia.
Los diseños que ofrecen son de un pezón hiperrealistas o un elemento representativo. Al momento de ver su tatuaje, a María se le llenaron los ojos de lágrimas.
" El estarte viendo al espejo te ves normal es satisfactorio. Te levanta el ánimo. ", concluyó María Eugenia.