Para Yahir y su familia, la venta de aguas frescas con la llegada de calor representa el principal ingreso para su hogar. Tiene 20 años de edad y desde hace tres años se planta sobre el primer cuadro de la ciudad en Navojoa abordo de su triciclo para ganar el sustento diario.
Llega a vender hasta 50 vasos de aguas frescas al día, de limón, jamaica, piña y cebada, donde se han incrementado las venras hasta 25%.
Tras el inicio de calor, regresa la temporada de mayor venta y el entusiasmo por mejorar su economía, aunque señala que las altas temperaturas tambien aleja la afluencia de personas por el centro de la ciudad.
"Ahorita apenas se están moviendo las ventas pero aquí nos colocamos, desde las 08:00 de la mañana hasta las 06:00 de la tarde a vender", agregó.
Relata que si no se trabaja no hay ingresos, por eso es que buscan los mecanismos para seguir trabajando aunque las ventas esten bajas.