La pandemia canceló un gran número de festejos navideños, desde posadas laborales e incluso algunas familiares, lo cual ocasionó un gran impacto económico entre los vendedores de carne, quienes vieron como este año se tuvo una reducción en sus ventas de hasta un 50 por ciento.
Y no es para menos, debido a que el Estado de Sonora registró alrededor de 32 mil empleos perdidos durante esta pandemia, por lo que la ciudadanía no cuenta con liquidez para realizar sus compras navideñas como en años anteriores.
Sin embargo, el cierre de la frontera ha resultado ser un respiro para el comercio local de venta de ropa y calzado, quienes aseguran que no han registrado mayores afectaciones.
Por ello esperan tener un buen cierre de año y que el semáforo epidemiológico les permita seguir trabajando para recuperar parte de lo perdido durante este año debido a la pandemia.