La vacuna de Pfizer contra el COVID-19 es la única avalada por la Organización Mundial de la Salud (y por la COFEPRIS en México desde el 3 de marzo) para ser aplicada entre la población menor de 18 años. De acuerdo a los ensayos clínicos puede ser aplicada a niños y niñas a partir de los 5 años, por lo que sería la candidata para ser aplicada entre los menores en el país en la próxima jornada nacional de vacunación a iniciar en mayo, según declaraciones del mismo presidente de la república.
Pero ¿por qué las vacunas para menores no han llegado tan pronto como para la población adulta? Esto se debe a la rigurosidad que deben tener los ensayos clínicos para descartar reacciones secundarias severas del fármaco. La particularidad de las vacunas pediátricas radica en su composición, por ejemplo, la de Pfizer, contiene una dosis de 10 microgramos; 20 menos que lo utilizado en las dosis de personas adultas; además contiene una solución amortiguadora diferente que ayuda a mantenerla estable a temperaturas refrigeradas durante más tiempo.
Otros fármacos están siendo testeados, con resultados muy positivos, en este sector de la población y esperan ser aprobadas por la OMS:
En el caso de Nayarit 130 mil 865 niños y niñas de entre 12 y 17 años de edad esperan recibir el biológico; mientras que 263 mil 592 menores de 11 años deberán seguir esperando para ser vacunados. Es importante señalar también que de acuerdo a la Secretaría de Bienestar de Nayarit un aproximado de 1500 menores del estado han sido vacunados a través de la vía del amparo.