Huatabampo, mejor conocido como la "Tierra de Generales" es considerado la cuna de la Revolución Mexicana en Sonora, sin embargo a 110 años de la lucha, existen héroes locales que aún siguen bajo el anonimato, sin recibir el reconocimiento que merecen.
Entre ellos se encuentran Juan "Chito" Cruz, su hijo Guadalupe Cruz y Mónico Valenzuela Ontiveros, todos bajo el rango de teniente coronel, además del sargento Julio Buitimea, colaboradores cercanos del general Álvaro Obregón Salido.
En 1912 salieron en armas junto a 300 hombres indígenas, rumbo a la capital del Estado, para incorporarse a la lucha revolucionaria y defender sus tierras en contra del general Pascual Orozco.
"Álvaro Obregón reunió a aproximadamente 300 hombres, principalmente indígenas mayos, precisamente frente al que hoy conocemos como Museo en honor al general Obregón, de ahí partieron rumbo a la capital para sumarse a la lucha", indicó José Luis Laguna Duarte, historiador de Huatabampo.
Como parte del rescate a sus héroes, el Gobierno Municipal de Huatabampo busca devolverle la gloria, incorporándolos a la monografía oficial al igual que asignar su nombre a las calles de la comunidad del Júpare donde son originarios.
"Haremos esa propuesta con el fin de se analice por parte de Cabildo y sea posible darle el nombre a unas calles de la comunidad del Júpare; Es importante que los jóvenes conozcan la historia, porque un pueblo que no sabe su historia no tiene rumbo para seguir progresando", puntualizó Pedro Borbón Coss, director de Educación y Cultura en Huatabampo.
Este futuro reconocimiento es aplaudido por los descendientes de estos héroes, quienes se encuentran muy orgullosos de la heroica hazaña realizada por sus ancestros.
"Me siento muy orgullosa de ser nieta del teniente coronel Cruz, estuvimos muy contentas al visitar y restaurar su tumba en compañía de las autoridades y esperamos con ansias que una calle lleve su nombre, pues no es fácil lo que logró por el país", confesó María del Socorro Cruz Soto, descendiente de Juan y Guadalupe Cruz.
En la comunidad del júpare se encuentra don Alfonso Cruz, de 98 años de edad, una fuente viviente de información para los más pequeños, quien ve con orgullo cómo se hizo justicia a su abuelo y padre, quienes serán inmortalizados como héroes de la Revolución Mexicana.