A pesar de ser considerado como el pulmón del Valle del Mayo, el Río Mayo, hoy atraviesa por una de sus peores crisis de sequía en los últimos 50 años, donde a pesar del inicio de la temporada de lluvias, los trabajos para rescatarlo aún lucen complicados.
Debido a la sequía, las autoridades talaron al menos el 50 por ciento, de los 95 álamos ubicados en el área recreativa, ya que se encontraban completamente secos y representaban peligro para los visitantes.
Con la sequía del 90% de los álamos, la zona del Río Mayo perdió parte de su fauna, como ardillas, aves, lagartijas, camaleones, y abejas.
Por ello, actualmente el Río Mayo se encuentra en "terapia intensiva" ya que tanto autoridades como grupos ciudadanos se han enfocado en reforestar la cuenca del río para poder rescatarlo.
Debido a las recientes lluvias, se ha logrado observar pequeños escurrimientos de agua en el río, lo cual significa un poco de esperanza para los ambientalistas.
Hasta el momento se ha logrado reforestar al menos 60 álamos, sin embargo, la meta para las autoridades es que para el mes de septiembre se logren plantar más de 100 árboles y que el Río Mayo vuelva a ser el pulmón del Valle del Mayo.