Ocho mil 349 desplazadas y desplazados sobreviven en Chiapas sin acceso a derechos humanos como: vivienda, alimentación, educación, salud e incluso agua, lo anterior, antes y en plena crisis humanitaria ante la emergencia sanitaria por COVID-19.
Estas más de ocho mil personas han sido desplazadas con agresiones, amenazas y en total impunidad, ya sea por problemas territoriales o políticos, la mayoría de ellos de municipios como Aldama, Chalchihuitán, Chenalhó y Chilón, sin que hasta el momento las autoridades estatales hayan actuado en favor de su situación.