Juan realiza diariamente un procedimiento para poder dializar a su mamá, quien tiene poco de iniciar con su tratamiento y lamentablemente hoy no tiene como continuar con él.
"Tenía yo el seguro del IMSS pero ahorita mi marido se quedó sin trabajo y nos lo quitaron pero ahorita no tengo para mis diálisis", María Elena .
Ya van más de 10 días sin que María Elena se dialice y las afectaciones a su salud se han vuelto más notorias, debido a que tiene dolor de cabeza y se le subía la presión porque la urea está muy elevada y necesita la eritropoyetina,la cual, tiene un costo arriba de los 600 peso y la caja solo le alcanza para media semana.
Elena, nos mencionó que le costó aceptar la noticia de tener insuficiencia renal crónica, por lo que no se atendió inmediatamente, lo cual, le trajo consecuencias
"Ella nos empezó a convulsionar como a eso de las 12 de la noche, fuimos al general y nos dijeron que ya no contaban con neurología y nos mandaron al del norte, ahí nos dijeron que nos iban atender pero no tenía lugar para que la dializaran", Juan, hijo de Elena.
Esta falta de atención no solo afectó SU salud, sino también en lo emocional, ya que a partir de esa convulsión empezaron sus diálisis.
"Al principio para mi fue difícil porque decía yo, porqué yo, tengo hijos, tengo por quien ver, se me hizo complicado, demasiado, me ponía a llorar casi del diario, decía porqué yo, porqué, porqué me castigan; pero ni modo, solo Dios sabe y lo tengo que aceptar, mientras Dios me preste vida para ver a mis hijos, con eso me conformo".
Hay que mencionar que este proceso también lo ha vivido su familia; sobretodo Juan, su hijo mayor.
"Ahorita lo hemos llevado bien pero el inicio nos costaba a todos, desde que la internamos que íbamos de un lado a otro, fue muy difícil también para mi yo me desvelaba tenía que ponerle pañal y hay que cambiarla y decía, mamá tengo hambre quiero dormir y no podíamos salir porque quién se quedaba con mi mamá; estaba yo solito y mi papá se iba a Metepec conmigo y se quedaba y mientras él estaba con ella yo me quedaba afuera a dormir y si él tenía que irse a otro lugar yo me tenía que volver a meter a desayunar o así", Juan, hijo de Elena.
Según el INEGI, desde el 2016 Puebla es el cuarto estado con más pacientes que reciben terapia de diálisis o hemodiálisis, los cuales, en su mayoría están afiliados a un seguro; sin embargo; para las personas como Elena, que no cuenta con la economía y tampoco está asegurada es difícil llevar esta enfermedad.
A pesar de que Elena está en la transición de aceptar su padecimiento, no pierde las fuerzas para seguir adelante, ya que tiene 4 grandes motivos por los cuales luchar.
"Algunas veces digo, hay que echarle ganas por lo que tengo, a veces me entristezco porque ya no puedo cargar a mi hijo, quisiera andarlo cargando, traerlo a mi lado y no puedo pero me conformo con verlos y abrazarlos que el la base principal de una madre de verlos y de decirle te puedo ver y tocar aunque no te pueda carga, pero lo tengo que aceptar".