#NiUnaMenos Ingrid murió a manos de su pareja

¡Ni una menos! exclaman mujeres, madres, hijas, nietas y abuelas, durante las marchas feministas; piden que dejen de matar a las de su sexo, aquellas compañeras, amigas, vecinas de piso. 

Pero aunque esta consigna le ha dado la vuelta no solo a México, sino a todo el mundo; en promedio en nuestro país se asesinan a 7 mujeres cada 24 horas, según informó la agencia de las Naciones Unidas para la Igualdad de género y Empoderamiento de las mujeres en México (ONU Mujeres).

Y entre tantos casos de los que somos testigo, hoy, la vida de Ingrid N., fue arrebatada a manos de su pareja Erick N., de 46 años de edad, quien ha declarado a las autoridades haber cometido la forma más extrema de violencia contra la mujer, feminicidio.

Ingrid, de tan sólo 25 años, era Licenciada en administración de empresas turísticas y maestra en Administración, vivía en la Ciudad de México, originaria de Necaxa Canaditas, perteneciente al municipio de Juan Galindo, Puebla; se mudó para poder continuar su proyecto de vida, ese que ella había planeado desde su infancia.

Durante la madrugada, en un departamento ubicado en la alcaldía Gustavo A. Madero, sus anhelos fueron tirados por la borda, jamás volveremos a escuchar una risa de ella, ni siquiera un buenos días, como solía decir al llegar a su salón de clases, tampoco sentiremos sus abrazos, ni podremos volver a verla a través de alguna red social. 

El feminicida confesó, ante un policía, que "el diablo se había apoderado de él", que no recuerda lo sucedido, en cuanto recobró la consciencia, se lamentó por lo sucedido, y no dudó en entregarse a las autoridades.  

Fue la mano empuñada contra su cuerpo y el filo de un cuchillo, que le dio el valor a Erick N,. para privar de la vida, de una manera brutal, a su pareja sentimental.

Hoy, sólo quedan sus recuerdos alrededor de su cuarto, la ropa favorita con la que solía salir, los libros que deboraba, su perfume, ese que la caracterizaba, la foto de graduación de la prepa, las vivencias con su familia, hoy, sólo quedan en la memoria de los que la conocimos, los mejores momentos que pasamos con ella. 

AC