El semáforo Covid-19 correspondiente al estado de Guerrero permanece en color rojo, a días del 1 de julio, fecha en que se prevé la reapertura gradual de ciertos establecimientos. Si el indicador no cambia a color naranja, la aplicación de la "Nueva Normalidad" podría posponerse. Este sábado 27 de junio, Guerrero superó los cinco mil casos confirmados acumulados de coronavirus (5,057), de los que tres mil 451 han logrado recuperarse, 526 aún se consideran activos a la enfermedad y 848 han perdido la batalla contra el Covid-19. De acuerdo al Secretario de Salud, Carlos de la Peña Pintos, el semáforo cambiará de color si disminuye el porcentaje de ocupación hospitalaria en la entidad, así como también la detección de nuevos casos y el número de fallecimientos. En ese sentido, actualmente Guerrero tiene un 46.3 por ciento de positividad al Covid-19 (qué tantas pruebas resultan positivas), que se califica del 1 al 4, siendo el 1 el más bajo y el 4 el más alto, en ese rubro la entidad califica como 4, es decir, color rojo. En la ocupación hospitalaria, representa un 56.2 por ciento, que recibe una calificación de 3 que lo ubica en color naranja. También se toman en cuenta la tendencia de hospitalización que tiene un 0.025 y la tendencia de casos síndrome Covid-19 que es de -0.007. Sin embargo la sumatoria de los puntos para semáforo ponderado, dan un total de 3.0, que da un resultado final de color rojo. Durante la conferencia vespertina del viernes, el subsecretario del gobierno federal, Hugo López-Gatell, indicó que Guerrero no pasará a color naranja la próxima semana, pese a que han hecho acciones para que haya una disminución notoria. En la vídeo-conferencia de este sábado, De la Peña Pintos resaltó que para estar en color naranja, no es por decreto estatal, sino es una suma de datos que maneja la dirección de epidemiología del gobierno federal y son ellos los encargados de determinar que la situación mejora o empeora en Guerrero, basado en los datos, que dijo, puede modificar solamente la población con sus acciones. En la sesión de preguntas y respuestas, Alejandro Bravo Abarca, Jefe de la Oficina del gobernador, respondió que están siendo cuidados con la reapertura, porque se busca el punto de equilibrio entre cuidar la salud y llevar a cabo la reactivación económica, ante el cuestionamiento sobre si se cancela o no los planes de la Nueva Normalidad a partir del 1 de julio. Aunque no se confirmó o descartó la reapertura en la fecha previamente indicada, la autoridad dijo que en tanto no se de una información continuarán haciendo acciones para lograr el cambio del color del semáforo a naranja y sea posible continuar con las actividades que han venido planeando desde hace varios días.