Triste pero cierto, el vandalismo ha atentado contra diversa infraestructura del Paseo Bravo; a un año de la inauguración de la rehabilitación de este espacio público, el sitio, luce deplorable. Y no solo por el grafiti, lajas rotas, hierba crecida, plantas secas, y bancas rotas, sino también por la basura que usuarios dejan diariamente en el piso, jardineras y en general, a lo largo y ancho del parque.
Asimismo, continúa la presencia de vendedores que no pudieron ser regulados por las pasadas administraciones municipal y estatal, a cargo de Luis Banck Serrato y Antonio Gali Fayad, respectivamente, ni por el actual gobierno municipal, encabezado por la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco, esto en contraparte, a que la mayoría de los módulos de ventas construidos, se encuentran desocupados.
Ante ello, ciudadanos reconocieron que la condición actual del Paseo Bravo, es consecuencia del mal uso que le dan los usuarios, además de la falta de conciencia respecto al manejo de la basura.
Cabe recordar, que la rehabilitación de este parque fue inaugurada el 25 de julio de 2018, tuvo una inversión de alrededor de 20 millones de pesos y corrió a cargo de los gobiernos municipal y estatal antes mencionados; cantidad que a decir de algunos poblanos y poblanas, no sirvió del todo, ante las condiciones en la que se encuentra actualmente, reiteraron, ante el vandalismo y el mal uso de los espacios.