Mapimí: Un municipio con historia, pero con crecimiento poblacional lento.
El Municipio de Mapimí, ubicado en Durango, ha experimentado un crecimiento poblacional lento en las últimas décadas, incluso registrando una disminución de habitantes en comparación con los datos de 1980, según los Censos de Población y Vivienda del INEGI.
De acuerdo con las estadísticas, Mapimí contaba con 28,093 habitantes en 1980. Para 1990, la población cayó a 25,124, y en el cambio de milenio, se redujo aún más a 22,211. La recuperación fue paulatina, registrando 25,137 habitantes en 2010, y alcanzando 26,932 en el Censo de 2020.
Año | Población |
---|---|
1980 | 28,093 |
1990 | 25,124 |
2000 | 22,211 |
2010 | 25,137 |
2020 | 26,932 |
Factores económicos y la emigración
Uno de los principales factores que explican esta disminución es la falta de empleo en el municipio. Históricamente, las granjas de pollos y la minería fueron las fuentes de ingreso más importantes. Sin embargo, como menciona el actual alcalde, Fernando Reverte: "Sí tenemos muchos paisanos que se nos fueron por lo mismo, porque no había empleo, no había fuentes de trabajo, no había nada y sí tenemos mucha gente que anda para el norte".
Los habitantes de Mapimí también mencionan la falta de opciones laborales. Laura Elena Muela, residente del municipio, señala: "Aquí en lo que más trabajan es en las granjas y ahorita que abrieron la maquila de Yura, es lo único que hay casi, la mayoría mucha gente se va para el otro lado por lo mismo".
Aunque la reciente llegada de la empresa maquiladora Yura ha ayudado a reducir las cifras de desempleo, la población aún considera que falta mucho por hacer, especialmente en lo que respecta a oportunidades para los jóvenes. "Sí, porque ya está subiendo más la comunidad, los estudiantes que salen y no tienen recursos para seguir estudiando, ocupan", señala Génesis Esmeralda, una joven residente, añadiendo que el programa "Jóvenes Construyendo el Futuro" ha sido de gran ayuda para muchos jóvenes de la región.
La importancia del turismo y los recursos naturales
A pesar de su declive poblacional, Mapimí es un lugar de gran valor histórico y natural, que cuenta con atractivos turísticos de renombre, pero que aún carece de la promoción necesaria para atraer más visitantes. José Ángel Ramírez, guía certificado del municipio, considera que una mayor publicidad es clave para el desarrollo turístico de Mapimí: "Yo creo que la publicidad de Turismo del Estado para que ustedes conozcan de la riqueza que tenemos, sí es lo que falta más, más bien publicidad y reconocimiento de cómo llegar al lugar".
El municipio es famoso por su puente colgante de Ojuela, una impresionante obra de ingeniería que aparece en diversas películas. Además, la Mina de Ojuela, que da nombre al puente, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2010, junto con el centro histórico de Mapimí.
Mapimí también cuenta con otros atractivos turísticos, como la Plaza de Armas, la Iglesia de Santiago Apóstol, el Museo Benito Juárez, la Zona del Silencio y la Reserva de la Biósfera Mapimí, entre otros.
Desafíos y futuro de Mapimí
El futuro del municipio parece estar condicionado por la capacidad de atraer inversión y generar fuentes de empleo. La escasez de agua es otro factor crítico, pero el proyecto Agua Saludable para la Laguna, que busca resolver este problema, podría representar una oportunidad para revitalizar el área.
A pesar de los retos, Mapimí sigue siendo un lugar lleno de historia, con 426 años de fundación, y que ha sido testigo de eventos clave en la historia de México, como la estancia de Benito Juárez y Miguel Hidalgo. Sin duda, el municipio tiene mucho potencial por descubrir, pero la falta de promoción y las limitadas oportunidades laborales siguen siendo barreras importantes para su crecimiento.