Estudiantes de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) organizaron una jornada de movilidad activa con la Casa Hogar Pan de Vida, en la que entregaron bicicletas que diseñaron y fabricaron como parte de su formación en el cuarto semestre de la carrera de Diseño Industrial con el apoyo del Laboratorio de Movilidad UAQ (Labmov) y diversos colectivos ciclistas, con el fin de ayudar a la comunidad del estado que se encuentra en situaciones de vulnerabilidad.
Estas unidades se desarrollaron en los talleres del Centro de Diseño e Innovación Tecnológica (Cedit) y el Laboratorio de Prototipos (Protolab) de la Facultad de Ingeniería, en favor de las niñas, niños y adolescentes de entre 6 y 17 años que viven en la Casa Hogar, a partir de una iniciativa que impulsó Froylán Correa Martínez, representante del Labmov, para favorecer el compromiso colectivo de las y los alumnos de la Alma Mater queretana y sensibilizarlos respecto al impacto positivo de utilizar sus conocimientos en beneficio de la población.
La labor fue el resultado de una colaboración interdisciplinaria, en la que las y los universitarios participaron a través de la materia de Diseño de Estructuras y Mecanismos, a cargo de Correa Martínez; el taller de Diseño III, que imparte Héctor Marín, y la clase sobre el Software CAM, de Ma. Fernanda Bañuelos.
Se contó con el respaldo de grupos ciclistas, entre ellos, Pedaleanda y Espacio Público, Infancias y Ciudades Amigables (Epicas), con el propósito de generar conciencia de los productos comerciales que se elaboran con un interés social.
Las actividades educativas y recreativas contemplaron una estación de lectura y una de juegos para conocer los conceptos de ciudad y urbanismo, al igual que una pista de práctica.
También se llevó a cabo un curso, que efectuó Bialcho Cycling, para la reparación de estos modelos, en una promoción de habilidades técnicas y del esfuerzo en conjunto.
Todas las tareas impulsaron el civismo de ciudadanos responsables y comprometidos, además de elementos para una urbe habitable y segura donde el auto no sea el eje de la vida urbana.
El equipo de la Facultad eligió a esta asociación civil por su trayectoria de trabajo y su intención de crear un circuito para bicicletas, con el objetivo de fomentar el ejercicio y la recreación.
Asimismo, se impartió un curso de educación vial a las personas participantes, que abordó temas como la pirámide de movilidad, la importancia del traslado activo y las consecuencias negativas del uso desmedido de los automóviles.
Froylán Correa adelantó que en también se donarán refacciones y un lugar para la instrucción en mecánica de bicis para jóvenes.
Se espera que estos proyectos continúen cada semestre con intervenciones en distintos albergues y espacios comunitarios en la región, en los que se invitará a las organizaciones y personas que tengan disposición de contribuir de alguna forma en este o en otros planes.