Con una capacidad máxima de 50 personas, la cual ya ha sido superada por la demanda de familias que están a la espera de que el gobierno de Estados Unidos reanude la recepción de permisos de asilo, la Casa del Migrante Don Chon enfrenta una situación apremiante.
No obstante la escasez de los recursos con los que se cuenta, afirma "Don Chon", se busca la manera de solventar las necesidades de los migrantes y darles las mejores condiciones en el albergue, en donde se tienen sanitarios y regaderas separadas para hombres y mujeres, además de que cuentan con aire acondicionado.
"Son recursos propios y recursos de ellos mismos, porque ellos mismos traen sus alimentos para procesarlos aquí mismo (...) llegan hermanos de la caridad y traen comida también para las personas".
Una situación similar ocurre con la Casa del Migrante Divina Providencia, en donde se ha registrado un incremento de familias que piden albergue por una o más noches debido a que las deportaciones incrementaron a partir del 4 de junio.
El director de esta casa del migrante habla de cómo están enfrentando esta situación.
"Tenemos informes nosotros de gente que está aquí en Casa del Migrante y que estaba en lista de espera ahí pues que tiene precisamente dos semanas (...) que no reciben, que no llaman a nadie, la gente sigue ahí con la espera de que esto cambie (...) en lo personal no creo que esto se vaya a modificar".
Se prevé una situación complicada para las Casas del Migrante en nuestra ciudad, a partir de que las deportaciones de Estados Unidos han aumentado más del 280 por ciento, ya que antes del 4 de junio por la garita local la cifra de personas deportadas rondaba desde cero a 40, pero después de esa fecha el rango se elevó a un mínimo de 70 y a un máximo de 155.
Es por eso, que también piden el apoyo de la comunidad que desee solidarizarse para donar artículos y alimentos que permitan seguir dando el apoyo a los connacionales y extranjeros que piden ayuda.
"En general, lo que es alimentación, perecederos, no perecederos, artículos de limpieza, artículos de higiene y lo que viene siendo ropa para menores, tan siquiera, le pedimos ahí sí un apoyo total a la comunidad".
"Nuestro columna vertebral en el menú es principalmente frijol, arroz y huevos (...) se quiebran en promedio 300 huevos al día (...) la comunidad sanluisina principalmente nos trae ropa, que es lo que procuramos canalizar a la gente en calida de calle y también aquí a los migrantes".