Cientos de familias que residen en la zona sur de la ciudad, la cual limita con el basurero municipal a cielo abierto situado al sureste de la mancha urbana, resienten los efectos de las constantes quemas de ese vertedero municipal de residuos sólidos.
Datos de transparencia indican que en los últimos cuatro años, en promedio se ha producido un incendio cada tres semanas.
Muchas de las familias que habitan viviendas que están aledañas al basurero refieren que es imposible respirar cuando el humo se dirige hacia sus casas.
La situación lleva ya mucho tiempo, afirman, y no han encontrado respuesta de las autoridades.
"Va como para tres años que no podemos apagar eso, se apagan, vienen los cholos otra vez y le vuelven a meter lumbre, si nosotros hacemos un llamado a las autoridades vienen nomás y no les hacen nada, y ellos toman represalias contra nosotros".
Además de las dificultades propias de trabajar con la basura y de extraer materiales reciclables entre toneladas de desechos, algunas de las personas tienen que enfrentarse a afectaciones en la salud propia y de familiares.
"Para mí es una chinga el humo porque mi hijo está en sillas de ruedas también y aquí está conmigo, y la tos, la tos, y yo también sufro mucho del pecho con tanta humareda (...) no se puede apagar porque lo apagan con la misma basura"
Mediante una solicitud de transparencia, la Dirección Municipal de Protección Civil y Bomberos Municipales dio a conocer que entre enero de 2020 y enero de 2024 se registraron 67 incendios en el basurón. Fue 2020 el año en el que se registraron más incendios, con un total de 22. También ese año se registró la mayor cantidad de incendios durante un mes, que fue el mes de marzo con seis eventos.
"Nos va mal, porque cuando tienen así todo el humo, la ropa, daña la ropa, daña a uno, tenemos niños y todo, les daña sus pulmones, y pues sí es seguido eso".
En la totalidad de los 67 incendios, la Dirección de Protección Civil indicó que la causa es desconocida.
Por su parte, quienes viven cerca del basurón y trabajan en él proponen una solución para evitar más incendios.
"Antes de aventar la basura como la están regando, necesitan echarle agua porque todo está prendido, llegan los recolectores y tiran ahí, llegan la máquina toda la basura la avientan donde está prendido supuestamente para sofocar el fuego y ahí están las consecuencias".