Una oportunidad temporal para trabajar mientras esperan la autorización de su paso a Estados Unidos a través de la aplicación CBP One o su regreso a su país natal, es lo que han encontrado muchos migrantes en su estancia en San Luis Río Colorado.
A medida que continúa el flujo migratorio hacia el vecino país o las deportaciones, este municipio se ha convertido en punto de parada importante, para los migrantes de diferentes partes del mundo.
"Yo vengo del Salvador"... "Aquí he encontrado la oportunidad de poder trabajar, medio tiempo y poder ayudar acá también"... "Yo venía con mi pareja el año pasado, gracias a Dios ella pasó, pero yo no apliqué".
Hasta el momento no ha habido una manifestación en contra por parte del sector empresarial, por el contrario, se ha empleado a un gran número de migrantes de diferentes partes de América Latina en este municipio.
De hecho organizaciones internacionales como la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) se han concentrado en este municipio en el apoyo a albergues como la Casa del Migrante ?Divina Providencia? y los Albergue ?Don Chon? con la llegada de más migrantes a la ciudad.
Por otro lado, estas organizaciones comunitarias han intensificado los esfuerzos para brindar apoyo, desde asesoría legal hasta servicios básicos, con el fin de mejorar sus condiciones de vida durante esta espera prolongada.
Desde el pasado 4 de junio, las reglas cambiaron en Estados Unidos, y a pesar de que algunos migrantes se esperaron hasta el mes de julio para desalojar la ?Línea?, la aplicación CBP One, lanzada por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de dicho país se convirtió en la única medida de acceso compartió el administrador de la Casa del Migrante ?Divina Providencia?, Martín Salgado.