Por: Abel Martínez Luna
Édgar "N", víctima de reclutamiento, "¿A los cuántos años empezaste a ejecutar? A los 11. ¿Tú eres el que sale en el video golpeando a un sujeto que está colgado en una casa? Sí"
Estas imágenes revelaron en 2010 una terrible realidad: niños en las filas del narco.
Edgar, "El Ponchis", dijo que el Cártel del Pacífico Sur lo obligó a sumarse a sus filas y asesinar a sus víctimas en Morelos.
"¿Quién te levantó?, El Negro. ¿Te convenció o te obligó a estar en esto? Me obligó. ¿Qué te dijo? Que si no trabajaba me iba a matar", asegura Édgar.
En 2015 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) estimó que 30 mil menores habían sido reclutados por la delincuencia, a casi 10 años expertos afirman que el fenómeno empeora.
Nohora Niño Vega, doctora en Ciencias Sociales, explica "las cifras no resultan muy claras, dado que esta participación no es fácilmente registrable. Sin embargo sabemos que vincularse y ser utilizado por estos grupos es una realidad que necesita ser atendida por el Estado".
Ahora la primera causa de muerte en adolescentes y jóvenes es el homicidio doloso, se registran tres cada día, dos de estos con armas de fuego.
Elizabeth Zaragoza Ruiz, analista de resultados de Seguridad y Justicia en la Oficina de las Naciones unidas contra la Droga y el Delito en México, expone, "Estas cifras, aun cuando no nos dicen la cantidad específica de niñas, niños y adolescentes que están siendo reclutadas, si nos dicen cuántos están en riesgo o son víctimas".
A los menores se les violan sus derechos a una vida libre de violencia, a la familia, a vivir y residir en un lugar y a la supervivencia.
Francisco Rivas, presidente del Observatorio Nacional Ciudadano, advierte "hay una muy alta probabilidad de que un joven que se involucra en la delincuencia sea víctima de homicidio o de desaparición".
Los criminales persuaden a los niños o los obligan a sumarse a sus filas, los ocupan como vigilantes, narcomenudistas y hasta asesinos.
México no ha atendido las recomendaciones de Naciones Unidas para proteger a los niños del narco, no ha tipificado el reclutamiento como delito, no ha evitado que siga el reclutamiento, tampoco ha atendido a los que ya fueron víctimas.
"Las instituciones del Estado mexicano aún carecen de diagnósticos puntuales, peor aún carecemos de políticas públicas efectivas para prevenir y reducir este fenómeno", señala Francisco Rivas.
Este grave problema está latente, hay más de 200 mil menores en riesgo de ser reclutados, en más de la mitad de estados, con nuevos modos de engancharlos.