La donación de órganos es una práctica de empatía hacia las demás personas que se considera fundamental para la cura de ciertas patologías con la que desafortunadamente son diagnosticados algunos pacientes, la donación se puede practicar una vez fallecida la persona o también en vida y, de cualquier modo, es un acto tan altruista como necesario.
Cualquier ser humano es susceptible al diagnóstico de estas nosologías por lo cual el acto de donación queda a conciencia en la reflexión de cada uno de nosotros. La elección de dar o no está en cada uno siempre y cuando nos encontremos con vida ya que una vez que se deja el plano de vida material son los familiares directos quienes aceptaran o no esta acción.
Los trasplantes salvan vidas, le brindan la oportunidad a los órganos de un ser vivo para aliviar a otro, como fue el caso de la pequeña Romina, una pequeña sanluisina que fue diagnosticada con leucemia en 2018.
La pequeña Romina ingresó al hospital por el área de urgencias en estado grave, se le dio tratamiento para generar su estabilidad integral y se realizaron los estudios correspondientes. Más de 4 años duró en espera la recuperación y el trasplante de la médula de la menor en la lista de recepción de órganos, proceso que debido a la llegada de la pandemia se ralentizó dejando de opción confiable el tratamiento con quimioterapias, hoy en día los padres de la menor se encuentran agradecidos por poder compartir con ella un día mas de vida.