Con la llegada del expresidente Donald Trump al poder la migración se vio severamente afectada, la militarización del ejercito mexicano, el encarcelamiento de los menores en jaulas, la construcción del doble muro y las deportaciones exprés forman parte de los candados que este presidente puso para un supuesto control sin embargo una política racista fue lo que profesó.
La llegada del nuevo presidente de Estados Unidos Joe Biden ha puesto en marcha regularizaciones migratorias donde se tomen en cuenta los derechos de los indocumentados para que asi tengan la oportunidad de mejorar su calidad de vida.
Una persona deportada no tiene las mismas posibilidades de intentar tramitar un reingreso al territorio estadounidense que las que tiene una persona que firma una salida voluntaria por lo cual las reformas migratorias implementadas por el actual presidente de Estados Unidos están siendo en Pro de los migrantes y sus familias.
La politica racista que Donald Trump trabajó durante su mandato no solo tuvo repercusiones en los procesos de indocumentados, tambien suscitó la discriminación y el maltrato hacia los migrantes por lo cual se dificulta la integración de los mismos a la sociedad.
Diversas son las cuestiones por las que los migrantes ven en el país norteamericano su futuro y eligen arriesgar su vida para llegar a el sin importar cuales son las consecuencias que enfrenten al llegar.
Entregarse a migración es una de las maneras que los migrantes tienen para solicitar asilo en el territorio americano en espera que su caso pueda ser atendido bajo las nuevas normativas migratorias que rigen el cruce ilegal de indocumentados.
Por día se expulsan en promedio 40 migrantes en el cruce fronterizo de San Luis Río Colorado, comprendiendo que este cruce es uno de los principales del estado de Sonora la cifra es realmente preocupante.