Las relaciones sexuales a temprana edad sin la orientación adecuada son uno de los principales factores para los embarazos adolescentes, sin embargo más allá de los riesgos en la salud que este conlleva, la vida de las jóvenes se ve interrumpida de una forma tajante debido a que se ven obligadas a madura prematuramente porque la vida de otro ser humano dependerá de ellas.
En la unidad de medicina familiar de la clínica 38 del IMSS, las cifras de estos casos se mantienen entre 20 a 25.
Oscar Castro director de la unidad de medicina familiar de la clínica 38 del IMSS, comentó que la organización Mundial de la Salud (OMS) define como embarazo adolescente entre los 10 y 20 años
En estos embarazos hay mayor probabilidad de desarrollar enfermedades que pueden poner en riesgo la vida, por ejemplo, preeclampsia, parto pretérmino, diabetes gestacional entre otros. Para iniciar la vida sexual se debe contemplar tener madurez anatómica, emocional y psicosocial.
Las personas más cercanas a los jóvenes son los padres y primeramente deberían ser ellos quienes brinden esta información a sus hijos siempre y cuando la información sea útil y que no sea falsa pues no solo se deben cuidar de embarazos adolescentes sino que también se prevengan de las enfermedades venéreas que algunas pueden llegar a ser mortal.