Con 50 presas en Estados Unidos y una en México, los volúmenes de agua estratégicos que contienen importantes cantidades de nutrientes para la fauna marina, son retenidos y no llegan a playas del Golfo de Santa Clara, afectando la reproducción, especialmente de las especies en peligro de extinción.
En esta tercera y última entrega de la serie "Golfo de Santa Clara, el acuario de Mexico", el biólogo Agustin Sanchez Osuna, afirmó que el verdadero problema de la afectación a la especies marinas es la retención de las aguas del río colorado, que al no llegar al mar, ocasionan problemas ecológicos de alto impacto, pues cambian la calidad del agua y por consiguiente la cadena alimenticia de las especies.
Antes del año 1993, cuando había escurrimientos fuertes por deslaves de hielos y lluvias que iban a parar a playas del Golfo de Santa Clara, bajaba la salinidad y se mantenía un estuario de tipo positivo, altamente benéfico para las especies.
El Río Colorado aportaba en aquella época 20 mil toneladas de nutrientes al mar por las aguas que drenaban y eso potenciaba una productividad de alrededor de diez veces más que la productividad natural que tiene en estos momentos.
En aras de proteger algunas especies marinas para que su hábitat natural no fuera modificado, el 10 de junio de 1993 fue declarada la reserva de la biosfera del alto golfo y Delta del Río Colorado, que abarca casi un millón de hectáreas que incluye parte de la zona terrestre colindante con el medio marino.
Esta medida fue buena, pero no suficiente para proteger a la fauna marina, porque la verdadera causa raíz del problema -insistió Agustin Sanchez-, es la retención total de las corrientes de agua provenientes del río colorado, que a la fecha solo drenan algunos excedentes pero que son usados para uso agrícola, industrial o urbano.
Cuando bajó la población de la totoaba y la vaquita marina se pensó que esto era a causa de la depredación de los pescadores, pero la realidad es que fue ocasionada por la insuficiencia de agua que ya no drena al mar, cortando el ciclo hidrológico.
"La pesca comercial nunca va a agotar las especies porque el pescador comercial va a capturar las especies que en el momento que se empieza a agotar el recurso ellos dejan de ir a pescar"
Para el biólogo Agustin Sanchez, es importante la protección de las especies marinas, pero es necesario defender la actividad pesquera porque los mexicanos requerimos de alimentos como el camarón y la curvina, la especie conocida como chano, sierra, cazones, mantarraya, almejas, jaibas, entre otras.
Incluso la comisión nacional de pesca lleva a cabo estudios de investigación para conocer el nivel de la población de cada recurso pesquero, con el fin de decretar vedas que precisamente garantizan que no se extinguirán las especies marinas.