El cierre de la frontera por parte de los Estados Unidos en Lukeville Arizona con Sonoyta Sonora ha dejado a las ciudades aledañas con preocupación, pues ante esta situación se ha invitado a utilizar las fronteras aledañas de Nogales y de San Luis Río Colorado.
El motivo de cierre, es por la afluencia de al menos 2,000 migrantes en Sonoyta, algunos de ellos han intentado cruzar de manera ilegal rebasando las capacidades de la patrulla fronteriza, por lo que la posible movilización a las ciudades aledañas podría provocar que se replique la misma estrategia.
"O sea eso es una lógica, si te cierran un puerto de entrada, pues muchas veces la gente se va a mover al siguiente, entonces es un riesgo, no un riesgo, es una posibilidad, de que sí aumente el flujo en este mes de Diciembre".
Un cierre en la frontera de San Luis Río Colorado representaría un problema enorme para sus habitantes, pues es un puerto bastante activo, según información de Puentes y Cruces Fronterizos, más de 5 millones de personas han cruzado por esta frontera desde enero hasta agosto de 2023, en su mayoría por razones de trabajo y negocios, seguido por motivos sociales y por compras, por lo que el aumento en el tiempo de espera para transitar no solo afectaría la vida personal de la comunidad, si no también la economía regional al desmotivar a los visitantes, y un cierre total de la frontera representaría pérdidas enormes para los comercios.
Ante esta situación, el presidente municipal de San Luis ha declarado que autoridades de migración aplican filtros a lo largo de la carretera entre Sonoyta y San Luis Río Colorado para que los migrantes no se trasladen hasta este municipio, evitando una crisis humanitaria al no contar con la infraestructura ni presupuesto suficiente para atenderlo a todos, así como para proteger la frontera local y evitar que se repita la medida en San Luis Arizona, cuidando también la economía local.
Por lo pronto se espera que los filtros de migración puedan proteger a San Luis, y así seguir administrando la ayuda a los más de 500 migrantes que ya se encuentran esperando un turno para recibir asilo político en Estados Unidos.