El 2020 ha sido un año atípico; una pandemia, crisis económica y crisis de seguridad que parecen no tener fin. La familia Martínez tiene 35 años dedicados a la venta de golosinas, frituras y bebidas en la vía pública, este año en particular ha sido como ninguno... La pandemia generó el aislamiento social y eso dejó las plazas y lugares públicos desolados, a la par trajo un golpe a las ventas de comercios semifijos dedicados a la venta de botanas. Don Juan ha tenido que buscarle y ampliar sus lugares de venta para conseguir el dinero suficiente. Don Juan Martínez ha visto caer las ventas de su negocio, día a día vende menos y compara sus ingresos antes de la pandemia... la venta ha caído y ahora vende menos de la mitad que antes, pese a ello no pierde la esperanza.