Ramón Enrique "N" fue condenado a 36 años de prisión tras comprobarse su responsabilidad en abuso y corrupción de menores en Salamanca.
Las investigaciones realizadas demostraron que el acusado cometió estos delitos contra una menor de edad, lo que permitió al juez emitir una sentencia condenatoria.
Además de la pena de cárcel, se ordenó la reparación del daño material y moral a la víctima, el pago de una multa y la suspensión de sus derechos electorales como parte de la sanción.