Otro tiroteo enluta a Estados Unidos. Esta vez ocurrió dentro de un hospital de Tulsa, Oklahoma.
Cuatro personas murieron, incluido el agresor. Los oficiales todavía están trabajando para despejar el hospital St. Francis, explicó el Departamento de Policía de Tulsa en Twitter.
Esta agresión ocurre días después de la masacre en la escuela primaria Robb, en Uvalde, Texas, que dejó 19 niños y dos maestras muertas.