En medio de un año desafiante para el sector agrícola en Salamanca y en todo el estado, los agricultores han expresado su frustración por lo que consideran apoyos insuficientes por parte de los tres niveles de gobierno. La falta de lluvias ha golpeado fuertemente a la agricultura de temporal, lo que ha llevado a una preocupante situación de escasez de alimentos y endeudamiento entre los campesinos.
Samuel Balderas, secretario de la CNC, dijo que un mal gobierno, una pandemia y una sequía esta terminando con el campo, esta ultima ha dejado más de 600 mil hectáreas sin sembrar debido a la falta de agua, lo que ha afectado gravemente a la producción de alimentos.Se estima que al menos 400 mil familias dependen de la agricultura de temporal para su sustento, y muchos de ellos se vieron obligados a endeudarse para poder sembrar sus cultivos. Sin embargo, la poca cosecha no ha sido suficiente para cubrir las deudas adquiridas, lo que ha llevado a una crisis financiera entre los agricultores.