Los trabajadores del volante están en crisis económica, actualmente se encuentran en una lucha contra el recorte de jornadas de trabajo por la inseguridad y la competencia con otras líneas del mismo sector, además del servicio de Uber, sin embargo no han aumentado la tarifa por la prestación del servicio, que actualmente oscila entre 40 y 45 pesos y en la noche incrementa a 50.
A decir del presidente de una línea de taxi local José Luis Navarro, la situación se ha tornado complicada para dueños las unidades al igual que para los choferes, sin embargo, dijo que mantendrán el costo ya que la economía ha afectado a otros sectores y no solo al servicio público.
Aseguró el líder de taxistas que no se permiten abusos de parte de los choferes con el cobro a los usuarios, por lo cual aplican castigos a todo aquel que cometa una infracción; los usuarios pueden reportar al chofer anotando el número de la unidad y marcando a la base de taxis.