En los últimos días, la ciudad de Salamanca ha experimentado un incremento significativo en las temperaturas, superando los 35 grados centígrados. Esta situación ha generado una ola de calor que requiere la atención y precaución de toda la población.
El aumento en las temperaturas conlleva riesgos importantes para la salud, incluyendo deshidratación, infecciones diarreicas agudas y golpes de calor, especialmente entre los grupos más vulnerables.
El jefe de la Jurisdicción Sanitaria V ha destacado la importancia de tomar medidas preventivas, como promover una alimentación saludable y mantener una hidratación continua. Además, se recomienda cocinar los alimentos correctamente para evitar la contaminación y la proliferación de bacterias, que pueden ser más comunes en climas cálidos.El uso de bloqueador solar y sueros hidratantes se vuelve fundamental para proteger la piel y prevenir la deshidratación. Las autoridades sanitarias enfatizan la importancia de mantenerse bien hidratado en todo momento y evitar la exposición prolongada al sol, especialmente durante las horas de mayor intensidad.