Algunos comerciantes fijos y ambulantes denunciaron malos tratos, abuso de autoridad y prepotencia por parte de los inspectores de Fiscalización y control.
Algunos comerciantes dijeron que los inspectores los han intimidado y amenazado con quitarles su mercancía, a lo cual otros ciudadanos han intervenido y le han pedido a los trabajadores del municipio retirarse del lugar.
Cabe mencionar que durante la fase 3 del coronavirus, en la que comerciantes considerados como no esenciales se vieron obligados a cerrar, también denunciaron prepotencia por parte de los inspectores.