¿Cómo afecta la contaminación lumínica?
La contaminación lumínica es aquella relacionada a las múltiples fuentes de luz artificial que alteran la oscuridad natural, el brillo o resplandor artificial en el cielo nocturno causado por la sobreiluminación de la vida nocturna de las áreas urbanas. Este afecta tanto a los seres humanos como al resto de la biodiversidad, influyendo negativamente en el estado anímico, causando problemas como depresión, ansiedad e insomnio.
La exposición excesiva a la luz artificial durante la noche puede interrumpir los patrones normales de sueño y estar relacionada con problemas de salud como trastornos del sueño, fatiga, estrés y otros problemas de salud mental y física. Además, puede alterar los ritmos biológicos naturales en humanos, animales y plantas e interferir con los ciclos de sueño, ya que las luces ocasionan que se inhiba la melatonina, la hormona encargada de regular el sueño; así como afectar la migración de aves, el comportamiento y la orientación de los animales nocturnos, y la vida silvestre, al modificar los hábitats naturales y la interacción entre especies e incluso la floración de ciertas plantas.
De igual manera, esto representa un despilfarro energético, pues la iluminación innecesaria o mal diseñada conlleva un desperdicio significativo de energía y recursos, una gran cantidad de luz emitida hacia el cielo no ilumina las áreas donde se necesita y contribuye al consumo innecesario de energía. Además de dificultar la observación del cielo nocturno y afectar a los astrónomos, ya que la luz artificial disminuye la visibilidad de estrellas, planetas y otros objetos celestes.
Para disminuir esta contaminación pueden tomarse medidas como usar iluminación más eficiente y dirigida, apagar las luces innecesarias durante la noche, utilizar tecnologías de iluminación inteligente y promover regulaciones que limiten el uso excesivo de luz artificial en áreas urbanas y rurales, pues reducirla no sólo protege la observación del cielo nocturno, sino que también se promueve un entorno más saludable y sostenible para la vida silvestre y los seres humanos.