Para los aseadores de calzado la crisis económica se ha prolongado, hay pocos clientes y de los 28 cajones que están instalados en el Jardín Principal, más del 50% se encuentran cerrados, algunos boleros se han visto obligados a buscar otra forma de llevar el sustento a sus familias.
Loas aseadores de calzado hacen el llamado a la ciudadanía para que acudan a lustrar sus zapatos y se mejore el campo de trabajo, ya que con las utilidades que se generan actualmente es imposible dar cobertura a los gastos del hogar y la educación de los hijos.
Pedro Zúñiga, quien es Secretario General de los Aseadores de Calzado, dijo que a pesar de que la situación económica es crítica, el oficio no desaparecerá, porque continuarán esforzándose día con día para mantener vivo su trabajo.