El encarecimiento de los fertilizantes ocasionó que el 2021 tuviera un cierre complicado para los campesinos, ya que en el Ciclo Otoño-Invierno únicamente se sembraron 40 mil hectáreas de las 120 mil hectáreas agrícolas que pertenecen al Distrito de Riego 011. Para el 2002 el panorama luce muy complicado debido a que el Gobierno Federal retiró todo tipo de apoyo y no hay subsidio para los trabajadores del campo.
Los robos en equipos de bombeo y el vandalismo en los mecanismos que tiene la red del Distrito de Riego 11, son otros factores que afectan a los productores agrícolas de esta región.
Además del aumento en costos de producción, de la falta de subsidios y de las afectaciones por robo y vandalismo, el productor agrícola también se ve afectado con la reforma a la Miscelanea Fiscal 2022, ya que ahora los pequeños y medianos productores agrícolas tienen que pagar un impuesto que aplica sobre la factura de venta.
Con esta reforma el productor agrícola se verá obligado a contratar un contador y a pagar impuestos no únicamente a la Federación, sino también al Estado.
Con muchos factores en contra, para este 2022 el campesino tendrá que ir cuesta arriba y siempre con la esperanza de que vengan tiempos mejores.