Argelia Ramírez, representante de SURBA en Salamanca, ha expresado su profundo pesar y preocupación tras los recientes eventos relacionados con el centro de control canino del municipio. La abogada y rescatista lamentó las acciones de los servidores públicos que, el pasado martes, procedieron a dormir a una perrita comunitaria sin seguir los protocolos adecuados.
Denunció que el centro de control canino del municipio opera sin una estructura clara de funcionamiento ni un reglamento interior formalizado. Además, la representante señaló que existe incertidumbre sobre si los sacrificios de animales realizados en el centro cumplen con la Norma 33, que establece los procedimientos para un sacrificio humanitario.
La representante también mencionó que varios peritos comunitarios han desaparecido en circunstancias sospechosas, y acusó al centro de control canino de levantar a estos peritos sin ingresarlos debidamente al centro. Esta situación, según Ramírez, representa una grave violación de la ley estatal sobre maltrato animal.
Argelia Ramírez anunció que presentará una denuncia formal ante las autoridades correspondientes para que se realice una investigación exhaustiva y se tomen las sanciones adecuadas contra los responsables. Los salmantinos y los defensores de los derechos de los animales esperan que se tomen medidas para garantizar la protección de los animales y la transparencia en las operaciones del centro de control canino.