La Comisión Nacional de Búsqueda, de la Secretaría de Gobernación, informó que al 16 de mayo de 2022 hay 100 mil 08 personas desaparecidas y no localizadas en el país.
23 personas desaparecen en promedio cada día en México. En los últimos tres sexenios han ocurrido el 81% de las desapariciones.
Jalisco, Tamaulipas, Estado de México, Veracruz y Nuevo León concentran el 70.7% de personas desaparecidas.
¡Hoy volvimos a encontrar un omóplato y un hueso del pie; y queremos hacer visible que somos las familias las que estamos buscando sin apoyo del gobierno!, dicen familiares los desaparecidos.
El drama
Las desapariciones dejan huellas profundas e irreparables en las víctimas y en la sociedad. Las madres deambulan bajo el sol abrasador? Hurgan en la tierra entre los muertos y restos sin nombre.
Buscan pistas en tumbas clandestinas esparcidas por el desierto, en laderas o mezclados en fosas comunes.
El comité de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) contra las desapariciones forzadas realizó una visita a México del 15 al 26 de noviembre de 2021.
Recorrió 13 estados y sostuvo 150 reuniones con autoridades y organizaciones civiles. Más de cien desapariciones ocurrieron durante la estadía de la ONU en el país.
Carmen Villa, del comité de la ONU contra desapariciones forzadas dijo que lamenta constatar que se mantiene una situación generalizada de desapariciones en gran parte del territorio del estado, frente al cual tal y como venimos señalando desde 2015, imperan la impunidad y la revictimización.
Antecedentes
La desaparición forzada se ha manifestado en México en tres periodos: la "guerra sucia" (años ?60) el conflicto zapatista (años ?90) y la guerra contra las drogas.
Alejandro encinas, subsecretario derechos humanos de Segob dijo que la mal llamada guerra contra el narcotráfico que inició en 2006, desató el fenómeno de la desaparición entre particulares, vinculada a la corrupción de las fuerzas policiales ligadas al crimen organizado.
¿Falta de capacidad o voluntad?
México carece de un sistema eficaz de procuración de justicia con rendición de cuentas.
La justicia le falla a las víctimas de desaparición y a sus familias desde el primer momento del proceso.
Solo el 3.5% de los desaparecidos están registrados como víctimas de delitos de desaparición forzada.
Alejandro Encinas, subsecretario de derechos humanos en Segob menciona que nos enfrentamos a la ausencia de mecanismos de búsqueda, deficientes registros de personas desaparecidas, ausencia de coordinación institucional y una realidad que tenemos que asumir, donde el estado abdicó de su responsabilidad en la búsqueda de personas.