A nueve meses de finalizar su mandato, el alcalde César Prieto parece encontrar dificultades para materializar la promesa hecha a los salmantinos de fortalecer el cuerpo policial de Salamanca con 250 nuevos elementos, un compromiso hecho durante su campaña, bajo la gestión del actual morenista, la atracción de interesados para unirse a las filas policiales ha ido disminuyendo progresivamente, ya que en la primera generación de reclutas se graduaron 14 individuos, cifra que ha ido descendiendo en las siguientes generaciones: 19 en la segunda, 9 en la tercera y solamente 5 en la última.
Actualmente, existen poco mas de 150 vacantes sin cubrir, lo que plantea interrogantes sobre la viabilidad de alcanzar la meta de 250 nuevos elementos antes de la culminación de la administración de César Prieto. Los desafíos económicos y los riesgos inherentes a la labor policial se señalan como los principales factores detrás de esta baja en el reclutamiento. Los salarios, considerados insuficientes por muchos potenciales candidatos, y la percepción de riesgo asociada al trabajo policial han disminuido el interés de los ciudadanos en unirse a la Policía Municipal de Salamanca.