Celia Alcantar García ha vivido muchos años, está por arribar a un siglo de vida y de su memoria empieza a escaparse el divino tesoro de los recuerdos, lo que no se borra de su mente es el agradecimiento a Dios por ser mujer? Doña Celia se siente plena con el camino recorrido, en su rol como mujer siempre se esforzó por ser buena hija, buena hermana, buena esposa y buena madre.
Doña Celia es originaria del municipio de Mororleón, pero llegó a Salamanca porque su esposo trabajaba en la refinería, sin embargo, a los dos años de estar en esta tierra quedó viuda y tuvo que dedicarse a trabajar para sacar adelante a sus dos hijos.
Este 8 de marzo que se conmemora el "Día Internacional de la Mujer", Doña Celia es ejemplo de fortaleza, hace 4 años, una caída la dejó imposibilitada para caminar, pero la voluntad, el tesón y el carácter de la mujer trabajadora sigue vivo en ella y no se rinde, todos los días, sale de su casa y con ayuda de su nuera se instala bajo la sombra de un árbol del Jardín Principal, ahí pasa 7 horas al día, esa es su trinchera, ahí recibe el apoyo y el cariño de la gente.
Con sus manos temblorosas, con su pelo cano, con las arrugas en su rostro, con la ternura en su mirada y con el amor en sus palabras al dar gracias por estar viva, Doña Celia es un ejemplo de vida, Doña Celia es una mujer a carta cabal.