Desde hace más de siete décadas Salamanca año con año recibe donaciones de asfalto de Petróleos Mexicanos (Pemex), donación que se aplica en vialidades de la ciudad.
A pesar de que ya se tiene tiempo que los gobiernos reciben donación tras donación, se estima que aún hay más de tres mil calles y caminos rurales de terracería, además de que hay baches en más de 80% de las vialidades pavimentadas, esto en las 200 colonias y 150 comunidades de la ciudad.
Ante la mala administración y aplicación de recursos que hubo en gobiernos municipales pasados, el presidente municipal, César Prieto Gallardo, estimó que serían requeridos más de cinco mil millones de pesos para ejecutar la totalidad de ese tipo de obras, mismas que de acuerdo al presupuesto anual de la administración requeriría más de dos periodos.
El atraso que presenta Salamanca en cuestión de infraestructura, el cual se estima que es de al menos 30 años, debido a una mala gestión y aplicación de recursos públicos, por lo que a través de una buena administración se busca sentar bases importantes, proyecto a realizar en su segundo periodo al frente del Gobierno, precisó Prieto Gallardo.
En cuanto a las donaciones de asfalto Ac-20, Roberto Muñoz Robles, director de Obra Pública, informó que en este trienio, a través del Programa de Apoyo a la Comunidad y Medio Ambiente (PACMA), implementa en los municipios en los que opera Pemex Exploración y Producción (PEP), se han recibido más de mil 500 toneladas.
A pesar de que este programa se creó en 2017 para impulsar programas de apoyo a las comunidades con la finalidad de resarcir daños y perjuicios por la industria petrolera, las donaciones de asfalto se han realizado desde los inicios de las operaciones de la Refinería Ingeniero Antonio M. Amor (RIAMA), en la década de 1950.