El 2023 fue un año de pocas lluvias lo que ocasionó severas pérdidas económicas para el sector agrícola, este 2024 no pinta para ser un buen año pues los gobiernos están apostando los recursos públicos a programas sociales; lo que ha descobijado al sector agrícola que sobrevive con complicaciones.
Según el Presidente del distrito de riego 011 las precipitaciones oscilaron entre 300 milímetros y CONAGUA les asigno una cantidad mínima de 460 millones de metros cúbicos, cantidades que no fueron suficientes para establecer un cultivo de otoño- invierno
El distrito de riego siembra anualmente entre 80 a 120 mil hectáreas, cosechando aproximadamente un millón de toneladas de maíz, y alrededor de 800 mil toneladas de trigo, sembrando en diciembre; para el ciclo otoño- invierno y cosechando en mayo. El resto de los cultivos se realizan cuando hay agua suficiente.
La situación se agrava porque el gobierno de Andrés Manuel López Obrador eliminó los 65 programas de apoyo que tenían para diversos rubros, por lo que ahora no tienen dinero para salir adelante.
Un panorama bastante incierto tiene ante sí, la mayoría de los productores agrícolas del estado, muy en especial los temporaleros, porque en los dos últimos años la lluvia ha sido escaza y temen que en este 2024 ocurra lo mismo.