En los meses de marzo y abril, en Salamanca se dio el cierre de al menos 10 comercios, desde restaurantes, tiendas de ropa, florerías y gimnasios. A través de redes sociales, dieron el anuncio de su cierre, algunos de manera temporal otros de manera definitiva, la problemática de la inseguridad los habia orillado a tomar dicha decisión.
En este 2019, se hizo presente la incertidumbre, la duda y las pocas garantías de seguridad, pequeños y grandes comercios han sido atemorizados por e tan temible cobro de piso.
Meganoticias logró platicar con un salmantino, comerciante, con familia y una vida que tuvo un giro de 180 grados. Arturo, un pequeño empresario, que se dedicaba a la venta de ropa, se vio envuelto en el terror de muchos, LA EXTORSIÓN.
Reveló que un día cualquiera a su comercio, llegaron dos hombres, "Así como cualquier otra persona, hicieron preguntas por la mercancía" dijo Luis.
Los hombres fueron directos, le pidieron dinero, lo amenazaron de muerte si no pagaba la cuota al mes, un monto de 20 mil pesos "me dijero que ganaba bien, que me iba bien en la venta que lo podía sacar" dijo Luis.
Luis, vivió un mes con el miedo, "Había días que no quería salir, me daba miedo pero tenía que trabajar, el mayor error que tuve fue no denunciar" dijo Luis.
Luis dejó de vender públicamente su mercancía, se ha mantenido en bajo perfil desde hace 4 meses, para salir de las ataduras de la delincuencia, cerró su local y dejó de vender en zonas comerciales.
A meses de lo sucedido, se siente aliviado de seguir vivo, pero aún le queda esa intriga, el miedo de que vuelvan a extorsionarlo, el terror de ya no ver a su familia.