Juan Franco, junto a su esposa, su hermana y su sobrina, acudieron desde la comunidad de la compañía, a visitar a sus papás y su abuelita, que yacen en el panteón de las Flores.
En el marco de la celebración de Día de Muertos, Juan junto a su familia partieron desde las seis de la mañana de su domicilio para llegar y tomarse el tiempo de adornar con flores, rezar y platicar con sus difuntos.
Mientras arreglan la tumba con flores que buscaron y compraron un día antes, entre risas, recuerdos y lágrimas, así viven el Día de Muertos.