En México tan solo, una de cada diez personas con síndrome de Down tiene acceso a un empleo, lo que pone de relieve la dificultad de este grupo para acceder a un trabajo digno. (Fuente: Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación -Conapred- )
Se estima que hay 7.1 millones de personas en México con alguna condición o problema mental, aunque no existen cifras exactas sobre cuántas de ellas tienen síndrome de Down. Esta falta de datos complica la elaboración de políticas efectivas para fomentar su inclusión laboral. (fuente: Instituto Nacional de Estadística y Geografía ? INEGI- )
A pesar de que aumentó la visibilidad sobre el tema, muchas empresas aún muestran resistencia a contratar a jóvenes con esta condición, en gran medida debido a prejuicios y malentendidos sobre sus capacidades.
La inclusión laboral no solo beneficia a las personas con síndrome de Down, también enriquece a las organizaciones al diversificar el talento y fomentar un ambiente de trabajo más inclusivo.
México aún tiene un largo camino por recorrer en materia de inclusión laboral. Es fundamental que se implementen estrategias que promuevan la igualdad de oportunidades y que se reconozca el potencial de las personas con síndrome de Down.