Cada hecho de alto impacto, masacres e inseguridad que se vive en la actualidad, es el reflejo de años de descuido, fracasos de política, educación, descuido en el tejido social, pérdida de valores e incluso descuido por parte de la iglesia.
Así compartió su opinión Enrique Díaz Díaz, Obispo de la Diócesis de Irapuato, donde señaló que actualmente se viven momentos tensos y hasta de desánimo, derivado de todos los acontecimientos que se viven a nivel nacional y local.
Agregó que es importante seguir construyendo desde el hogar, los valores, el respeto a la vida de los demás y la propia, rescatar a los jóvenes que actualmente se encuentran hundidos en los consumos de algún tipo de droga o bien arrastrados por grupos delictivos.