En tiempos de cambio, el papel de los jóvenes en la toma de decisiones políticas se vuelve más crucial que nunca. Las elecciones no solo determinan quienes serán nuestros líderes, sino el rumbo que tomará nuestro país en los próximos años.
El voto es una herramienta poderosa que permite a los ciudadanos influir en las políticas que afectaran su vida diaria. Los jóvenes, al votar, pueden ayudar a dar forma a un futuro que refleje las prioridades que necesita la sociedad como seguridad, oportunidades laborales, igualdad de género y sostenibilidad ambiental.
Este año en el padrón electoral hay registradas 51 millones 852 mil 294 mujeres; 48 millones 188 mil 701 hombres y hay 90 registros solicitados como personas no binaries.
De los 97 millones de inscritos en la lista nominal, 12.5 millones son personas de más de 65 años, le sigue los jóvenes de 20 a 24 años con 11.25 millones; el tercer lugar lo ocupa la población de 25 a 29 años con 11.01 millones. Los jóvenes que tiene 18 años en la lista nominal es de 1.8 millones, mientras que aquellos de 19 años son 2.1 millones.
Los jóvenes están en una posición única en estas elecciones donde tienen la responsabilidad de votar y honrar el trabajo de generaciones anteriores y buscar una sociedad más justa e inclusiva.
El voto es una de las formas más directas y efectivas de participar en la democracia. Los jóvenes tienen el poder de influir en el rumbo de su país y enfrentar los desafíos del presente y del futuro. Salir a votar no solo es un derecho, sino una responsabilidad hacia uno mismo y hacia la sociedad.