Encender velas perfumadas en casa es una práctica bastante común desde hace años, ya que aromatiza los hogares y crea un ambiente agradable para quien disfruta la fragancia, sin embargo, aunque las emisiones producidas por la vela no generan un daño grave a la salud humana, es importante tomar ciertas consideraciones en cuenta antes de encender una.
En algunas personas, cierto tipo de velas podrían llegar a causar alergias, debido en parte a las fragancias, ya que las velas pueden desprender ciertos aceites esenciales, como el de citronela, por lo que es importante revisar las etiquetas de estos productos antes de adquirir uno, pues también los llamados extractos naturales son alérgenos más potentes que las fragancias sintéticas, además de considerar el hollín emitido a causa de la combustión. A la hora de comprar se recomienda evitar cualquier cosa que no sea cera o mecha, ya que cualquier aditivo aumenta la posibilidad de reacciones alérgicas en personas sensibles, con efectos que pueden ir desde urticaria y eczema hasta migrañas y síntomas similares al asma.
De igual manera, aunque encender velas no sea un problema para quienes no son sensibles a los alérgenos también es adecuado no desatender la vela, ya que la emisión de alguna partícula indeseable liberada en el aire podría llegar a causar un incendio, lo que podría no convertirse en un riesgo tan grande, siempre y cuando se limita la cantidad que se encienden a la vez y se manejen con cuidado.
Si se desea minimizar la posibilidad de irritación por las emisiones de las velas, hay que reducir su número, elegirlas sin perfume, fragancia y color, y escoger las que son hechas con cera muy refinada, quemándolas en un recipiente que no sobresalga por encima de la mecha. Una alternativa a las perfumadas, son las velas de cera con fragancia sin mecha, que se funden con un calentador eléctrico y no producen ollín.