Los delitos al interior del mercado "Tomasa Esteves" continúan, locatarios aseguran ser víctimas recurrentes de robos, pero se ven impedidos de denunciar por temor a represalias, han reportado pérdidas significativas debido a robos de mercancía, así como daños a sus establecimientos, lo que ha mermado considerablemente su economía.
Además de los robos y actos vandálicos, los comerciantes reportan una caída en ventas, que se ha hecho más evidente con el paso de los meses.
La creciente inseguridad no solo afecta las operaciones dentro del mercado, sino también el flujo de compradores. Muchos evitan acudir al centro de abastos, temerosos de encontrarse en el lugar o momento equivocado. Este ambiente de incertidumbre y peligro ha generado un descenso notorio en la afluencia de clientes
Pese a que muchos locatarios han intentado tomar medidas de seguridad privadas, las condiciones siguen siendo precarias, lo que aumenta el sentimiento de vulnerabilidad. La falta de denuncias oficiales, debido al miedo y la desconfianza en las autoridades, perpetúa un ciclo de impunidad que dificulta cualquier intento de solución.