Mari, ha sido comerciante toda su vida, desde niña ayudó a sus papás en su negocio de botanas que se ubicaba en el jardín principal, la llegada de la pandemia de Covid-19, perjudicó dos décadas de arduo trabajo.
Decidió salir adelante y adaptarse a los tiempos difíciles, reveló que lamentablemente no estaba preparada para este cambio, ni ella ni nadie.
Botanas y Tostadas ´Mari´ fue un negocio heredado por su padres, día con día se colocaba en el jardín principal, ante el cierre de este sus ventas se vinieron a abajo, a pesar de que había opciones de instalarse en otro punto.
Hoy Mari recorre las calles del centro y mercado, ofrece tamales y atole, reveló que tras más de un mes en la incertidumbre, el hambre, los pagos pendientes, la necesidad simplemente la orillaron a buscar alternativas