Cada vez más gente visita el Jardín Principal y los vendedores de globos sienten un respiro porque las ventas empiezan a mejorar.
Los globeros forman parte del paisaje en plazas y jardines, son personajes que se han visto muy golpeados por la pandemia y en algunos casos tuvieron que combinar su labor comercial con alguna otra actividad.
Desde hace más de 30 años, Alejandro Reyes, vende globos en el Jardín Principal y nunca había enfrentado una situación económica tan complicada, sin embargo, cada día sale de su casa impulsado por el cariño que le tiene a su trabajo, en tiempos de pandemia, Alejandro encuentra fortaleza en el amor de su esposa y de sus hijas.
Instalado bajo la sombra de un árbol, Alejandro no pierde la esperanza de que será una buena jornada? Alejandro mantiene viva la fe de ver llegar a los niños acompañados de sus papás para comprar un globo.