Luego de la fumarola de color amarillo que emanó de la refinería Ing. Antonio M. Amor (RIAMA) en Salamanca, el sábado 18 de febrero, fue a causa de un descontrol, aunque no fue necesario, denunciar ante la Agencia de Seguridad Energía y Ambiente, ya que se siguió el protocolo establecido, aseguró Alberto de la Torre Gleason, director General de Medio Ambiente.
Derivado de esta fumarola, la cual tenía residuos de azufre y vapor no se reportaron afectaciones a la población.
El director, indicó que se tiene una muy buena comunicación con autoridades de Pemex.
Explicó que en situaciones como esta, donde se aprecia una nube o fumarola amarilla por el SO2, por el dióxido de azufre, después blanca es el vapor y el color negro que es al final cuando comienza el arranque y ajuste de las plantas que son puntuales y de poco tiempo.