Ahora que las presas El Huaricho y Mendoza han incrementado su nivel de agua y ambas se encuentran prácticamente al 100% de su capacidad, las autoridades municipales hacen el llamado a la ciudadanía a no meterse a nadar.
El director de Protección Civil, Candelario Cú Gutiérrez explicó que al servir las presas como vertederos de poca capacidad, no tienen compuertas y el exceso de agua sale de forma controlada y sigue un cauce natural que llega a drenes ubicados cerca de poblados, sin ponerlos en riesgo de inundación.
Aunque ninguna comunidad se encuentra junto al cauce de las presas, se recuerda a la población que está prohibido nadar en estos cuerpos de agua, ya que el terreno es irregular y poco firme, por lo cual resulta peligroso.
En atención a esta situación, personal de Protección Civil y elementos de la Policía Municipal hacen recorridos para verificar el orden, la limpieza y la aplicación de las medidas para evitar todo tipo de riesgos y la propagación de contagios de Covid-19 en estos lugares de esparcimiento.